En una misma historia nos regala la autora el México de los años de la Revolución y la España de finales de siglo. Ambientada entre nuestro magnifico estado de Chiapas (Hola Claudia!) y sus recien descubiertos paraisos habitados por extranjeros. Y, por otra parte Santander.
Diego Cabarga, frustado aspirante a escritor es comisionado a la ciudad de Santander para escribir la historia de una naviera. Indagando en los viejos archivos de la empresa, descubre la clave de un amor que jamas se realizo. Es una historia de encuentros y desencuentros. Donde los que se aman no se acercan y los que se desprecian si lo hacen.
Diego, utilizando la desilusion amorosa como pretexto literario, recrea esa historia y al hacerlo llega a confundir la suya propia con la que esta testificando.
Una historia que te atrapa desde las primeras paginas y el corazon no deja de sentir sienta sosobra entre capitulo y capitulo.
Esta es la primera vez que leo a Monica Lavin y no sera la ultima. El Sabado pasado fuimos a Obregon (al fin Fer!) y en nuestra libreria preferida lo he encontrado no segui buscando mas por miedo a encontrar.. la crisis! aqui esta una lista de mas titulos de Lavin
Para seguir con el tema de los regalillos..
Aqui estan los patrones de los 2
Ayer buscando en linea la caratula del libro me topo con que en las cafeterias de Espana a quien el tema del cafecillo nos es simpatico tiene varias presentaciones y dentro de las que especifican me topo con que Cafe Cortado es con leche al gusto..
Mmm..
Salud!
7 comentarios:
Bueno... Es café con nube. :)
Adoro el cortado! sentir el olor nada más porque hace añois no tomo, me cae mal! bue! acá mientras tomo mate Argentino, probaste alguna vez? Carmen, sí que pertenezco a la de varios tej. a la vez y hay algunos inconclusos, que ya voy a editar a ver si me animan a terminar. Besos
Cafecito con leche y pan, se oye bien para desayunar, y con el libro que nos cuentas, si lo recomiendas, uno más en la lista de compras.
..mmm....se me vienen a la memoria muchas cosas...amanecer en Palenque,, el olor a café te guía hasta el mercado....pero caf´.Café....mmmm,,,me gustaron mucho los proyectos...(pausa)me distrajo el ruido,,jaja,,estoy en casa y en éste momento pasa un vendedor ambulante " con altavoces",,ofrece ""pomada de vívora de cascabel""¿¿¿¿????sebo de coyote ¿¿''''??? etc,etc,,,....hasta parece que vivo en Catemaco..saluditoss..Ale
Hola Carmen!
Hmmm adoro el café!!! ... a penas me levanto tiene que se un café negrito sin azúcar, sino no ando jejje
Gracias por tus visitas .... recin vengo porque ando como loca, tengo miles de cosa entre manos y no se cual terminar o con cual seguir :( ... a veces me veo como una gallina que corre alrededor del gallinero, hace bulla y bota plumas pero nada útil jejej ... serán los tiempos???? ;)
Bueno te dejo un besote y me voy a tejer calcetines para no morir de frío jejej
Pues sí, aquí es muy habitual pedir un cortado y es un café con leche pero pequeñito, más grande que un café solo. Yo para empezar bien la mañana necesito mi café con leche y mi librito (eso ahora que por fin he dejado el vicio, porque antes... el cigarro no faltaba).
Los bichos son muy simpáticos. Besos
Para los porteños, el cortado es un clásico: café con apenas un poquito de leche. Hasta nos basta hacer un gesto caractríistico con los dedos para que el mozo del bar sepa que queremos un cortado. Inverso: la lágrima (no es popular aquí), que es leche con apenas un poquito de café.
Besos,
Marisa
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